Salutación
En nombre de la Fundación Mutua Madrileña quiero manifestar nuestra satisfacción porque la primera
edición del Diccionario de términos médicos de la Real Academia Nacional de Medicina sea hoy una realidad,
tanto por lo que va a contribuir a facilitar la importante labor social que llevan a cabo miles de profesionales de
la medicina en España y en Latinoamérica, como por el hecho de que la ayuda de nuestra fundación haya sido
clave para que su realización se haya llevado a efecto.
Y es que la importancia de llevar a buen puerto este proyecto iba, desde el momento de su concepción,
mucho más allá de la meta de llenar un vacío y de crear una nueva herramienta de trabajo, necesaria y accesible,
para todos los médicos que se comunican en castellano. Este primer diccionario buscaba, utilizando lo que más
nos une, esto es, el idioma y la palabra, crear entre los hombres y mujeres de todos los países de habla hispana
que se preocupan por cuidar y atender la salud de los demás un nuevo lazo no solo cultural, sino práctico y de
utilidad, tanto para ellos como para sus pacientes.
La dimensión de esta obra, que se ha concretado tras varios años de esfuerzo y trabajo riguroso de la Real
Academia Nacional de Medicina, excede por lo tanto el colectivo al que va dirigido, y es motivo por el que en
su momento decidimos apoyarla, sin dudas y de forma decidida, en las fases sucesivas de trabajo que ha vivido
y que finalmente han llegado a su culminación.
La importante contribución de Mutua Madrileña a la realización de este proyecto responde, así, no solo a
nuestro compromiso con la mejora de la salud de nuestros conciudadanos, que llevamos a la práctica tanto a
través de la prevención como de la ayuda a la investigación, sino también a nuestra creencia de que las empresas
pueden y deben implicarse cada vez más en el desarrollo de las sociedades a las que pertenecen.
La salud es y ha sido siempre un elemento fundamental del bienestar individual y colectivo, y su cuidado y
promoción es uno de los objetivos de mayor relevancia para todos los países, independientemente de su nivel
de desarrollo. Por ello, cobran especial importancia y significado proyectos como el de este diccionario que,
como antes señalaba, va a servir de referencia y guía a todos los profesionales de habla hispana que trabajan en
el cuidado de la salud de sus conciudadanos.
El apoyo a la salud, tanto a través de la búsqueda de nuevos y avanzados tratamientos para mejorarla como
mediante la introducción de una cultura de la prevención en esta materia, es uno de los pilares en los que Mutua
Madrileña basa su responsabilidad social como empresa. Este compromiso, una gran parte del cual se articula
a través de la Fundación Mutua Madrileña, forma parte de nuestra cultura empresarial y con él buscamos
contribuir, en la medida de nuestras posibilidades, a la calidad de vida como una vía de mejora social.
De esta forma, la Fundación Mutua Madrileña desarrolla, desde su constitución en 2003, una intensa actividad
en el ámbito de la salud por medio, fundamentalmente, de nuestro programa anual de ayudas a la investigación
médica, ámbito en el que se ha consolidado en los últimos años como una de las entidades privadas que más
recursos destina a esta labor en España, mediante la concesión de premios que reconocen la labor y el esfuerzo
desarrollado por los profesionales de la medicina en su trabajo científico, fomentando campañas de prevención
en materia de accidentes cardiovasculares, cáncer, obesidad y otros problemas de salud cada vez más habituales,
y contribuyendo a la mejor formación del colectivo médico concediendo becas para la ampliación de estudios en
el extranjero y la realización de tesis doctorales, así como organizando cursos de especialización y actualización
de conocimientos médicos en diferentes campos como la oncología, los trasplantes o los politraumatismos,
entre otros.
Todas estas iniciativas impulsadas desde la Fundación Mutua Madrileña, junto a otras áreas de actuación,
como el apoyo a la cultura, el desarrollo de iniciativas en materia de seguridad vial o el apoyo a colectivos
desfavorecidos, nos permiten año a año mantener nuestro compromiso de responsabilidad corporativa.
Para terminar, solo quisiera transmitir a los médicos que lean estas líneas, allá donde se encuentren, el
agradecimiento de Mutua Madrileña por cuidar y velar por la salud de todos, y desearles que el uso de este
diccionario les ayude a realizar la importante labor que llevan a cabo. Si es así, los esfuerzos de la Real Academia
Nacional de Medicina en poner en marcha y organizar el desarrollo de la obra, de los diferentes equipos de
trabajo que se han encargado de llevar a buen puerto el proyecto, y de la Fundación Mutua Madrileña por
apoyarlo económicamente y hacer viable su realización, habrán valido la pena.
Ignacio Garralda Ruiz de Velasco
Presidente
Fundación Mutua Madrileña